viernes, 25 de septiembre de 2009

POÉTICA DE BOLSILLO
TANGO DEL NIÑO MIRÓN
Ya no me importa, como antes,  
hacer el tango a altas horas  
disimulando azules, añiles y violetas  
bajo la sombra ladina de un sombrero  
cómplice en garabatos  
sobre adoquines porteños  
llenos de plata de escamas y olores de lágrimas.  
 
“Fuiste la culpable de mi absoluta derrama  
por las pendientes de la vida de poza en poza  
cada vez más emponzoñadas”. Dijo la letra  
y asentimos amarraditos.  
 
Alma que me tocaste en suerte  
una noche de fanales apagados  
donde la luz era misterio y la sombra  
una guadaña que los misterios destripaba  
el canto de los gemidos, el alcohol y la danza  
de carnes inexistentes justo, hasta aquella mañana  
que amanecí en las arenas mojadas de tus ancas.  
 
Nos encontramos y desde entonces  
carne y uña desaforadas  
hemos estado juntos bailando este tango  
de noches, de desaprovechadas esperanzas  
donde el bandoneón  
suena con suspiros de puta encinchada  
en jerseis de rayas azules y blancas  
como las olas del mar que o nos da la vida,  
o nos la mata.  
 
Entre corto y paso largo  
entre bordón y filigrana,  
entre tornillo, plante y beso  
por encima de tu hombro veo  
en la puerta de la taberna, un chiquillo.  
Y también miro, en la suya, mi mirada.  
Y es cuando haces como que te desmayas y te entregas  
con el suspiro final del tango que ya se acaba.  
 
Barcelona día de la Mercé 2009 -Para ellas.