OJOS EN LA ARENA

Se trata de ir cabizbajos, no porque estemos apesadumbrados si no porque exploramos la arena buscando ojos.
Los ojos de la playa son redondos, chatos y bicolores. Por un lado son color naranja y por el otro de un blanco resplandeciente. Su espiral perfecta nos hace pensar en nuestra Galaxia.
En las relaciones entre la matemática y la vida.
Lo interesante del juego es que el que más ojos coja, pierde y paga el vino de la comida.
Jamás jugarás un juego en el que desees tanto perder.